Follando con el portero.

Me llamo zafiro y tengo 25 años de edad, me encontraba llegando a mi edificio, al entrar me encuentro con el pedaso caliente del portero, si digo pedaso de hombre es porque se ejercitaba y estaba come queria, aparte de que tenia unos labios apetecibles, sus ojos eran marrón, pero atractivos y su piel bronceada, uff estaba para comércielo. Camino pasando aun lado de el y este me saluda con una amplia sonrisa.

—Buenas tardes señorita zafiro, ¿Viene de la universidad? —pregunta gentil gentilmente, me detengo y me giro para verlo dándole una de mis mejores sonrisas.

—¡Sí Jorge! Hoy el día estuvo voy atareado en la facultad de Medicina —le digo y este asiente, ¡Y si! Yo estudio para convertirme en medico cirujano, pero ese es otro tema aparte, aquí lo importante es que estaba frente al hombre que me hacia tener sueños húmedos.

—señorita zafiro... ¿Se encuentra bien? —pregunta Jorge, sacándome de mis pensamientos, yo me avergüenzo agachando la mirada.

—Oh! Disculpa Jorge, pensaba en una tesis que tengo que entregar el viernes, pero dime... ¿Qué decías? —le muestro mi interés y este asiente.

—Pues le decía que hoy se veía muy hermosa —sonríe picara mente y yo muerdo mi labio inferior, al parecer me estaba coqueteando y la verdad es que no desaprovecharía la oportunidad, me acerco a el poso mi mano en su brazo correspondiéndole el coqueteo, este levanta una ceja y me mira con una media sonrisa.

—gracias Jorge, es muy amable de tú parte —comienzo a acariciarlo en forma de seducción y este corresponde ya que acerca su cara hasta la mía y captura mis labios con los suyos en un beso feroz lleno de pación, se separa de mi y mira a ambos lados y cuando ve que no hay nadie a nuestro al rededor y vuelve su mirada a mi.

—Acompáñame —toma mi mano y me lleva con el a una pequeña habitación en la cual al entrar empieza a besarme hambrientamente, sus manos comienzan a recorrer todo mi cuerpo, mi cuerpo se sentía arder y con cada rose que daban sus manos en mi. Quita mi blusa y después mi sujetador exponiendo mis pechos, toma uno de mis pezones con su boca y comienza a morderlo y succionarlo, cada vez me sentía más y más húmeda, esto en definitiva no se aparecía en nada a mis fantasías, sube mi falta hasta mis caderas y desgarra mi ropa interior.

—Muchas veces soñé con poseerla señorita zafiro, mire como me tiene —comienza a restregar su enorme bulto en mi feminidad y eso me hace jadear.

—Pues cumple tú sueño y hazme tuya —le digo con voz entrecortada mientras mi respiración era acelerada. Este en respuesta me vuelve a besar mientras desabrochaba sus pantalones y los bajaba junto con su bóxer, me levanta mientras yo rodeo su cintura con mis piernas, comienza a frotar su erección contra mi vagina y pequeñas descargas comienzan a recorrer mi cuerpo.

—Estas tan mojada —dice y de un momento a otro se introduce dentro de mi, yo grito mientras mi espalda se arquea, se queda unos minutos esperando que me acopla a su tamaño y después comienza a mover sus caderas en un ritmo que se sentía jodida mente .

—¡M...Más r...rápido! —le digo y este comienza a bombear con estovadas duras y certeras las cuales daban en el lugar correcto, no se cuanto tiempo paso pero poco a poco comencé a sentir mi orgasmo, mi vagina comenzaba a contraerse y de un momento a otro explote con un fuerte grito.

—Así nena, carrete para mi —sus movimientos comienzan a ser más rápidos, siento su pene contraerse y se corre dentro de mi, llenándome de su esperma, ambos nos quedamos viendo, recuperando el aliento, este besa mis labios y ahí me di cuenta que esta no sería la unica vez que fallaría con el sexy de mi portero....